¿Cómo mejorar la relación con los alimentos y nuestro cuerpo?
Vivimos en una sociedad que constantemente bombardea con mensajes sobre dietas, cuerpos «perfectos» y restricciones alimentarias. Esta presión puede llevarnos a una relación conflictiva tanto con la comida como con nuestro cuerpo. Sin embargo, es posible romper este ciclo y empezar a construir una conexión más sana, consciente y amorosa con nosotros mismos y lo que comemos.
1. Escuche a su cuerpo, no a las dietas
El primer paso para mejorar la relación con los alimentos es reconectar con las señales naturales de hambre y saciedad. Las dietas restrictivas suelen enseñar a ignorar estas señales, lo que puede causar ansiedad, culpa o atracones. Practicar la alimentación intuitiva permite comer cuando se tiene hambre, detenerse cuando se está satisfecho y elegir alimentos que realmente se disfruten y nutran al cuerpo.
2. Deshágase de la culpa
Comer no debería ser motivo de culpa. Ningún alimento es “malo” por sí mismo. Una alimentación saludable también incluye flexibilidad, placer y balance. Permítase disfrutar de una comida sin remordimientos y recuerde que lo que come en un solo día no define su salud ni su valor como persona.
3. Cambie el diálogo interno
¿Cómo le habla a su cuerpo? ¿Se critica frente al espejo? El lenguaje que usa influye en cómo se siente. Trate de reemplazar las críticas por palabras de gratitud: agradezca a su cuerpo por todo lo que le permite hacer cada día. La aceptación corporal no significa conformarse, sino tratarse con respeto y compasión, sin importar el tamaño o la forma.
4. Rodéese de mensajes positivos
Cuide el contenido que consume en redes sociales. Siga cuentas que promuevan la diversidad corporal, el autocuidado y una visión realista de la salud. Esto puede ayudar a reducir la comparación constante y a normalizar los distintos tipos de cuerpos.
5. Busque apoyo profesional si lo necesita
A veces, mejorar la relación con la comida y el cuerpo requiere el acompañamiento de un profesional: un nutricionista clínico o un terapeuta que trabaje desde la perspectiva de la alimentación intuitiva y la imagen corporal. Pedir ayuda es un acto de valentía, no de debilidad.
Reconectar con su cuerpo y con la comida es un proceso, no un destino. Merece alimentarse con placer, vivir sin culpa y tratarse con amor. Su cuerpo no es un proyecto que necesita ser arreglado: es su hogar.
Laura Valdés, Nutricionista
Centro de Nutrición Clínica
Teléfono: 4001-7666
citas2@cncsalud.com
Referencias bibliográficas:
https://cdn.optumwellbeing.com/pdf/February_2024_Relationship_with_Food_es-MX.pdf
https://institutodehipnosisypsicologia.com/alimentacion/
Etiquetas: alimentación consciente, Amor propio, Autoaceptación, bienestar integral, Body positivity, mindful eating, Nutrición sin culpa, rompe con las dietas, Salud Emocional, salud mental