Dieta de Eliminación
La dieta de eliminación se utiliza para identificar alergias alimentarias, intolerancias y sensibilidad alimentarias.
El propósito de esta es dejar de consumir ciertos alimentos que nos pueden estar causando alguna afectación, eliminarlos por un período de tiempo para disminuir las molestias y en algunas ocasiones se puede volver a introducir de modo estratégico en la dieta.
Alergia alimentaria
Esta ocurre tiempo después de exponerse a la proteína de ciertos alimentos, puede ocurrir horas o minutos después de haber consumido un alérgeno; los principales síntomas son: erupciones y enrojecimiento de la piel, labios inflamados, dificultad para respirar y perdida del conocimiento.
Las alergias alimentarias afectan nuestro sistema inmune, se diagnostican y tratan a través de un alergólogo.
Intolerancia alimentaria
Se da cuando el cuerpo no puede descomponer los alimentos adecuadamente, empieza en el tracto digestivo; los síntomas están relacionados con la cantidad de alimento consumido e inician con calambres abdominales, vómito y diarrea.
Sensibilidad alimentaria
Es una respuesta inmunológica no medida por IgE (anticuerpos producidos por el cuerpo), se puede dar por el consumo de algunos alimentos como aquellos que tienen gluten; sus principales síntomas son, la fatiga, confusión mental, dolores articulares y erupciones en la piel.
Según investigaciones científicas entre los alimentos que ocasionan este tipo de problema podemos incluir: pescados, mariscos, carne, huevos, lácteos, cítricos, frutos secos, semillas, mayonesa, mantequilla, margarina, tomate, berenjena, papas, chiles, legumbres, soya, azúcar, dulces, café, té, productos con cafeína, especies, gluten y granos que lo contengan como el trigo, centeno, cebada, avena.
¿Cómo funciona una dieta de eliminación?
La dieta de eliminación debe ser guiada por un especialista en nutrición y su enfoque puede cambiar según el profesional. Esta inicia por fases, eliminando un alimento a la vez para poder identificar cual es el que está ocasionando el problema y así poder proporcionar alivio inmediato al paciente, luego se da la fase de reintroducción de alimentos, la cual se debe hacer de una manera lenta, consiente y por último se encuentra la fase de individualización.
Fase 1: Eliminación
La fase de eliminación tiene una duración de cuatro a seis semanas, su objetivo es eliminar los alimentos que están provocando problemas de salud y disminuir completamente los síntomas.
En algunas personas la dieta puede provocar estrés y otros tipos de síntomas, sin embargo, si no existe ningún tipo de mejoría en dos a cuatro semanas, no hay razón para continuar con el proceso.
Fase 2: Reintroducción de Alimentos
Esta fase es la más importante, su objetivo es reintroducir cuidadosamente uno por uno los alimentos para evaluar si uno de estos es un desencadenante y si durante este proceso no ocurre ningún síntoma con ese alimento puede permanecer en la dieta durante largo plazo; por eso si se hace de forma incorrecta los síntomas podrían volver.
Un ejemplo de una dieta de eliminación es la dieta FODMAP, la cual está diseñada para personas con “Síndrome de Intestino Irritable”, en donde se consume un alimento nuevo de un determinado grupo de FODMAP cada tres días con el propósito de aliviar los síntomas, identificar alimentos desencadenantes y permitir una reintroducción adecuada.
Fase 3: Individualización
Después de haber completado la fase 1 y 2 de forma correcta, el profesional en nutrición debe elaborar un plan de alimentación individualizado que limite o elimine ciertos factores desencadenantes de los alimentos, pero que tenga variedad y este equilibrado. Sin embargo, la eliminación de ciertos alimentos de por vida depende de las afecciones de la persona.
Alimentos seguros durante la dieta de eliminación
- Verduras, menos las que se mencionaron con anterioridad
- Frutas no cítricas o acidas
- Leche de coco o arroz
- Aceite de oliva o de coco
- Te y café sin cafeína
Beneficios
- Ayuda a identificar alimentos que no están beneficiando a nuestra salud.
- Nos permite tratar padecimientos crónicos como migrañas, problemas gastrointestinales, inflamaciones.
- Regeneración del intestino.
- Es económica, ya que incluye alimentos de bajo costo y de fácil adquisición.
- Los planes de alimentación son totalmente personalizados.
Riesgos
- Durante este proceso debido a la eliminación de ciertos alimentos pueden desencadenarse deficiencias nutricionales, por eso es importante tomar en cuenta una posible suplementación durante este periodo.
- Pérdida de peso no deseada.
- Relación poco saludable con los alimentos en personas con patrones alimentarios poco saludables.
- Si se realiza por tiempo prolongado puede haber cambios negativos en la microbiota intestinal.
Es importante tener en cuenta que una dieta de eliminación debe de ser temporal, que no es una dieta para perder peso; es una herramienta para identificar, mejorar, eliminar problemas alimentarios y debe estar acompañada de un profesional en nutrición el cual nos ayudará a mantener una relación saludable con los alimentos y garantizar nuestra salud física y mental.
Dra. Griselda Chavarría, Nutricionista CNC
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Referencias Bibliográficas
- Navarrete-Rodríguez, E. M., et al (2015). Boletín médico del Hospital Infantil de México, 72(2), 112-117.
- https://www.forbes.com/health/body/what-is-elimination-diet/
- Barboza, F. (2009). Aspectos clínicos de la alergia alimentaria.
- Segersten, A., & Malterre, T. (2016). La dieta de eliminación: Descubre qué alimentos te hacen daño y siéntete como nunca. GRIJALBO.