Importancia del Consumo de Omega 3
¿Qué es el Omega 3?
El omega 3 es un ácido graso esencial poliinsaturado no sintetizado por el organismo, por lo que es necesario obtenerlo a través de la alimentación. Los principales son el ácido alfa-linolénico (ALA), precursor del ácido eicosapentanoico (EPA) y del ácido docosahexaenoico (DHA).
Una dieta rica en omega 3 ha sido estudiada y analizada desde el punto de vista de beneficios para la salud, sobre todo en la disminución de lípidos en sangre y en la relación con el comportamiento y conducta de los niños.
Funciones
Este nutriente ayuda a proteger las neuronas y mejora la memoria, su consumo durante el embarazo es primordial para un adecuado desarrollo del sistema nervioso del feto, también se ha notado la disminución de depresión postparto y diabetes gestacional. Puede llegar a aumentar 4 puntos el coeficiente intelectual de los niños, protege neuronas cerebrales y evita la aparición de trastornos del comportamiento como el Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH).
También se han encontrado beneficios en cuanto al estado de animo de las personas adultas que presentan algún trastorno psicológico.
Es utilizado por deportistas, para mejorar su rendimiento, ya que ayuda al metabolismo celular y junto con el omega 6 tienen efecto antiinflamatorio.
En la actualidad
Recientes estudios establecen las razones por las cuales actualmente existe un desbalance y desequilibrio en el consumo de omega 3, ya desde hace mucho tiempo este ácido graso es primordial no solo para el crecimiento y el desarrollo, sino también porque participa en la prevención y tratamiento de enfermedades. Los cambios en los hábitos alimentarios de los últimos años, han provocado un alto consumo de omega 6 y un bajo de omega 3, por lo que es importante conocer cuáles en qué alimentos se encuentran y seguir recomendaciones nutricionales para compensar dicho desequilibrio.
Fuentes
Las fuentes más importantes de omega 3 son: los pescados azules (sardina, salmón, atún), aceite de linaza, de canola, de nuez y de soya, semillas de calabaza y de chía, la quínoa, las nueces, la avena, así como todos los alimentos enriquecidos con este ácido graso que ofrece la industria alimentaria en la actualidad.
La leche materna contiene de DHA, alrededor de 30mg por cada 100g, mientras que la leche de otros mamíferos como la de vaca, oveja o cabra es casi inapreciable, razón por la cual se incentiva la lactancia materna.
La recomendación sobre el consumo de esta nutriente varía con la edad, por lo que es necesario valorar en qué etapa de la vida se encuentra el paciente y así brindar un dato acertado.
Se recomienda la suplementación con omega 3 en mujeres embarazadas, deportistas, niños con trastornos conductuales, personas con enfermedades inflamatorias o personas con un bajo consumo de alimentos fuentes del nutriente.
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